Rodrigo Moreira, defensor de Independiente, habló en El rojo es mi pasión por AM 1490 Radio Gama ayer por la noche hizo refencia a muchos temas: Su debut como titular, el momento del equipo, sus inicios, su paso por San Martín de Tucumán.
Este domingo Moreira debutó como titular en la primera, explicó: “Estoy muy contento. Fue positivo. Estaba esperando esta oportunidad para poder mostrarme”.
El último mercado de pases, volvió de su prestamó en San Martín de Tucumán, comentó que todavía tiene que mejorar para estar en Independiente: “Se que vengo de una categoría menor, pero me voy adaptando al grupo y al juego que quiere Ariel”.
En el partido ante el Pirata Cordobés, se pedió un claro gol en el area chica que dió en el traveaño, aclaró la jugada: “La pelota me quedó un poco alta, cuando quise bajar la pierna ya se había subido. Me sigo lamentando”.
Sobre las chances creadas y erradas durante los partidos del torneo comentó: “En la Superliga falta más tranquilidad. Tenemos muchas situaciones y estamos muy ansiosos. Ariel nos pide paciencia si no metemos los goles. Lo que mas tenemos que trabajar es la ansiedad”.
El último encuentro la zaga central la disputó con el venezolano Fernando Amorebieta, opinó: “Me sentí cómodo con Amorebieta, me dio mucha seguridad, le falta terminar de adaptarse en la Argentina” y agregó: “Me dijo (Amorebieta) que le sobre en la espalda o que el me sobre a mi”.
Su puesto lo pelea con el central titular Alan Franco, destacó sobre su compañero: “Franco es un jugador notable. Tiene muchas condiciones”.
En el 2015 estuvo en la selección sub 20 con muchos jugadores que hoy están en Europa, contó su experiencia: “En las juveniles estuve con Driussi, Simeone, Pezzella y Mammana. Aprendí el día a día y saqué un plus con ellos”.
El “Chiqui” mencionó las palabras del DT antes del encuentro del domingo: “Holan me dijo que juegue tranquilo, que haga lo que tenga que hacer, la oportunidad ya se va a dar”, también le agregó que: “le iba a dar una oportunidad por todo lo bueno que hizo en San Martín y por la continuidad que consiguió”.
En cuanto a su préstamo por el “Santo”, consideró: “La pasé muy bien en Tucumán. Me fui porque me llamó el ayudante de Cagna. Fui mejorando la confianza. Cuando tengo la pelota, pienso que no la voy a perder”.
En ese momento el entrenador era Gabriel Milito, argumentó su salida: “Hablé con Milito y me dijo que me iba a tener en cuenta, pero que adelante mio hay otros jugadores”.
“Ojalá me toque jugar en la SuperLiga y en la Sudamericana, pero el que decide es Ariel”, expresó sus ganas de ser titular, pero no depende exclusivamente de él.
Este fin de semana vuelve a ser sin fútbol, esta vez, por fecha FIFA, consideró que “el parate viene bien para seguir trabajando y pulir algunas cosas”.
El defensa hizo una comparación entre los entrenadores que tuvo este último tiempo: “Con Cagna mejoré en la parte defensiva, me hacía trabajar el uno contra uno”, sumó: “Con Holan para jacer un gol tenes que hacer 20 toques y con Cagna era un saque de arco y hacíamos el gol”.
Para cerrar, comentó el porque de su apodo: “El profe de la octava me puso “Chiqui”, era grandote y los demás eran chiquitos”, finalizó.
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